El contrato

Desde la publicación de su primer libro, su éxito no había hecho sino crecer, cada uno de ellos se vendía como rosquillas e incluso algunos habían sido adaptados al cine de una manera espectacular, algo muy difícil cuando se lleva una obra literaria a la gran pantalla. Todo parecía sonreírle hasta que firmó el contrato de su vida. La editorial le ofreció un contrato por sus próximos tres libros, era una cifra que nunca antes se había imaginado y que le haría el autor mejor pagado del mundo. El contrato se podía considerar como un adelanto de las ventas que tendrían sus libros viendo la progresión de sus anteriores obras, la editorial conseguía su exclusividad y no iba a perder dinero. Hicieron una gran fiesta para celebrarlo con la gente que él quería, nada de fiestas falsas, incluso trajeron a su grupo favorito para que tocara en directo. Todo el mundo estaba muy feliz menos él, no sabía porqué pero tenía un nudo en el estómago que no le dejaba disfrutar del momento.

 

El primer libro se publicó dos años después, todo seguía el plan previsto. No había sido complicado porque lo tenía casi hecho antes del contrato, ya tenía todas las notas sobre la historia y los personajes así que lo único que tuvo que hacer fue transformarlas en una historia. Cuando se puso a trabajar en el segundo se dio cuenta de lo que había hecho, ya no tenía más ideas guardadas en el cajón, ahora tenía que pensar en una y la presión no le dejaba hacerlo. Había probado diferentes técnicas: ponerse delante del folio todos los días y escribir aunque fuera una tontería hasta que surgiera la historia, viajar para encontarse con la historia por el mundo, quedarse en casa leyendo lo que otros habían hecho mucho antes que él; nada de esto funcionaba. La historia no quería salir, su cerebro estaba paralizado por la presión y el miedo, miedo a fracasar y no poder cumplir el contrato así que la solución podía ser acabar con él. Se reunió con su abogado y prepararon todo lo necesario para volver a ser un hombre libre. Tuvo que devolver parte del dinero. La editorial sabía de su situación así que no lo presionó más, veía que era un autor acabado, sus musas le habían abandonado y no iban a sacar nada más de él.

 

En cuanto cesó la presión, el nudo del estómago que le había acompañado todos estos años desapareció y pudo vivir más tranquilo. Naturalmente volvió a escribir porque esa era su vida aunque esta vez no entregó nada para que lo publicaran, ya verían la luz una vez muerto él. Esto sucedió dos meses después de que la editorial supiera de la existencia de sus escritos.

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4 respuestas a El contrato

  1. Javi dijo:

    Que asesinos estos de la editorial…

  2. Esther dijo:

    Bajo presión las cosas no salen bien, eso está claro

  3. Carlos dijo:

    Je, o se trata de ciencia ficción y es un escritor honrado o mucho me temo que en circunstancias de falta de creatividad se contrata a un negrito del África Tropical.

  4. Rosa dijo:

    Cualquiera se mete en líos de editoriales :PLo de las crisis de los escritores siempre me ha llamado mucho la atención, porque nunca me queda claro si es culpa de la presión externa o de la falta de talento del escritor. Si fuese por presión externa, no podría escribir casi ninguno, porque en la sociedad en la que vivimos es lo que manda y gobierna el mundo, con lo que queda la falta de talento del escritor, lo que nos lleva a pensar que hay que dudar mucho de los libros que llegan a las librerías, lo que nos lleva a su vez a lo que comenta Carlos.Por tanto ¿ sabemos lo que leemos ? ¿ sabemos quien ha escrito realmente lo que leemos ? ¿ importa si nos gusta de todos modos lo que hemos leído, más alla del nombre que firma ?Fdo. una petarda que habla y habla y habla…..

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